A Mezquita

El Concello de A Mezquita ocupa una parte de la Comarca de As Frieiras (formada por los Concellos de A Gudiña, Vilariño de Conso, O Rios y A Mezquita). El nombre de «As Frieiras» se debe a las propiedades que los monjes o frailes «frailes» tenían en la zona. El municipio tiene una limitación geográfica muy característica, denominada «O PENEDO DOS TRES REINOS», situada en el extremo sureste del municipio.

Tiene una superficie de 104,3 km2 y cuenta con una población de 1.437 habitantes situada en la parte sureste de la provincia de Ourense. Población que se distribuye en diez núcleos: Manzalvos, Cádavos, Chaguazoso, Castromil, Esculqueira, A Mezqui- ta, Santigoso, Vilavella, A Canda y O Pereiro.

A Mezquita es la puerta de entrada a Galicia desde Castilla y Portugal. Esto se refleja en su escudo. Disponemos de una línea de ferrocarril, Ourense – Zamora, con la estación situada en la localidad de Vilavella. Además de la Autovía A-52 “Rías Baixas”, así como la Nacional 525.

CARACTERÍSTICAS GEOGRÁFICAS

• Cuenta con una altitud media de 850 metros sobre el nivel del mar, con una orografía muy accidentada.
• El clima es oceánico en la sierra, con fuertes contrastes, húmedo y frío en invierno y seco y templado en verano.
• Estas condiciones se reflejan en la vegetación en la que destacan grandes masas de “castaños”, así como abedules, fresnos y sauces en las riberas y algunos pinares de repoblación. En las cumbres domina el matorral.
• Disponemos en el municipio de una densa red fluvial afluente del Duero portugués (los ríos más importantes del Concello son: Pereiro, Chao do Porco, As Veigas, Cádavos).

HISTORIA

En la Edad Media, la Mezquita perteneció a los señoríos de los Condes de Monterrey y los Pimentel de Benavente. A principios del siglo XIV (año 1312) se documenta la presencia en la Mezquita de la Orden de Jerusalén o del Temple, encargada de defen- der la Ruta Mozárabe Jacobea, que se adentra en Galicia procedente de la Meseta y el Norte de Portugal.

A Vilavella gozaba del título de villa. Doña Juana La Loca y Don Felipe el Hermoso pernoctaron aquí el 16 de junio de 1507, durante la emisión de la sucesión de los Reyes Católicos.

El municipio estuvo inmerso en las guerras de separación de Portugal durante el siglo XVII, e incluso tras la firma de la Paz en 1713, los portugueses llegaron a O Pereiro para impedir el tráfico con la Meseta. También fue escenario de escaramuzas durante la Guerra de la Independencia, como zona de entrada y salida de las tropas francesas al mando del mariscal Soult. La aplicación del Tratado de Límites que puso fin a las luchas por los pueblos de la frontera, la epopeya de la construcción del ferrocarril y la presencia de los maquis en la posguerra son los últimos hitos históricos que caracterizan esta zona.

PENEDO OS TRES REINOS

El Penedo dos Tres Reinos (o Fragua dos Tres Reinos) es una elevación de 1.025 metros, integrada en el sistema montañoso de la Sierra de Marabón, en el límite entre los tres antiguos reinos medievales de Portugal, Castilla y Galicia. Hay un manan- tial llamado «Os Tres Reinos», que es a donde va el ganado de los tres pueblos vecinos.

Es un símbolo que permanece vivo en la piedra y en la memoria, porque la realidad ha llevado a seguir fomentando las relaciones humanas y económicas, potenciando hoy sectores de actuación como el turismo rural, con planes comunes a los pueblos de la Comarca.

O Penedo se encuentra en el límite entre la parroquia de Moimenta, en el municipio de Vinhais (Portugal), el municipio de A Mezquita, en la provincia de Ourense (Comunidad Autónoma de Galicia) y el municipio de Hermisende, en la provincia de Zamora. (Comunidad Autónoma de Castilla y León).

En 1864, con el trazado definitivo, realizado por la Comisión de Límites, de las fronteras entre Portugal y España, se mantuvo la frontera de siglos en esta región. Aunque hoy en día ya no existen los tres reinos que dan nombre al bosque en cuestión (Portugal se convirtió en república, y Galicia y León se integraron en el reino de España), su antigua y secular denominación se ha mantenido inalterable.

Como corresponde a los dialectos gallego-sureste, la palabra fraga es un equivalente de roca, roca, con correlatos en el trasmontano fraga.